Nuestras manos están expuestas a muchas cosas. Los factores externos como el viento, la lluvia, el sol y el agua pueden deshidratar la piel rápidamente pero, además, nuestras manos también están expuestas regularmente a disolventes, tensioactivos y un lavado frecuente de manos. Como resultado, los sistemas naturales de protección y reparación de la piel están sobrecargados y esto puede dañar la función de barrera de la piel, haciendo que las manos sean más susceptibles al daño solar, las arrugas y la sequedad. Por eso es importante brindarles a nuestras manos un poco más de atención cuando podamos.

UTILIZA UNA CREMA DE MANOS RICA EN LÍPIDOS

Al igual que ocurre con el contorno de ojos, la piel de nuestras manos es más fina que la del rostro o el resto del cuerpo y tiene menos glándulas sebáceas, por lo que es menos capaz de producir componentes que retengan la humedad y mantengan la piel protegida e hidratada. Esto significa que a medida que envejecemos y la piel pierde elasticidad de forma natural, las manos envejecen de forma más visible que otras partes de nuestro cuerpo. Una crema de manos rica en lípidos que proporcione hidratación, humectación y con propiedades calmantes es vital para retardar los signos visibles del envejecimiento de la piel y fortalecer la función de barrera cutánea.

USA UN JABÓN DE MANOS ADECUADO

Nuestras manos están constantemente expuestas a cosas con las que nuestro rostro, por ejemplo, nunca estaría en contacto. Los jabones y desinfectantes para manos antibacterianos son excelentes para la higiene, pero contienen ingredientes agresivos que pueden ser terribles para la salud de la piel, como el alcohol y las fragancias. La función de barrera natural de nuestra piel también puede dañarse cuanto más nos lavamos las manos. ¿La solución? Elije jabones de manos que contengan humectantes y aceites para aumentar la hidratación de la piel y recuerda aplicar crema de manos con regularidad para ayudar a fortalecer, hidratar y proteger la barrera cutánea.

APLICA TU PROTECCIÓN SOLAR TAMBIÉN EN TUS MANOS

Este puede ser un paso que se pasa por alto en las rutinas de cuidado de la piel de la mayoría de las personas, pero aplicar protector solar en las manos es clave para prevenir el envejecimiento y protegerlas de los rayos UVA y UVB. El daño solar no sólo acelera el proceso de envejecimiento sino que también puede provocar manchas solares, decoloración y cáncer de piel. Aplicar un SPF de amplio espectro en la parte superior de tus manos diariamente (ya salgas o no al aire libre) desempeñará un papel muy importante para mantener tus manos más jóvenes y con un aspecto más saludable.

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