El signo más evidente del envejecimiento se refleja en la piel. Con la edad las funciones generales de la piel disminuyen como resultado de una combinación de factores intrínsecos y extrínsecos:

El cambio intrínseco o cronológico ocurre naturalmente con el tiempo, provocando cambios estructurales y funcionales en todas las capas de la piel.

Los factores extrínsecos están en gran medida relacionados con el medio ambiente y el estilo de vida, como la contaminación, el tabaquismo y la exposición crónica al sol. Se considera que la radiación ultravioleta (UV) por la exposición al sol es el factor principal del envejecimiento prematuro de la piel o fotoenvejecimiento.

EL PAPEL DEL COLÁGENO

“El colágeno es una proteína estructural abundante en todos los animales. En los seres humanos, el colágeno comprende un tercio de la proteína total y representa las tres cuartas partes del peso seco de la piel”. ("Collagen structure and stability” por M.D. Shoulders y Ronald T.Raines).

Encontrada principalmente en la matriz extracelular de varios tejidos conectivos del cuerpo (cartílago, huesos, piel), esta proteína sintetizada naturalmente es producida por fibroblastos y consta de aminoácidos (particularmente glicina, prolina e hidroxiprolina) unidos para formar una triple hélice, proporcionando estructura y alta resistencia a las fuerzas de tracción.

En la piel, el proceso de síntesis de colágeno ocurre dentro de la dermis, la capa media de tejido conectivo (entre la epidermis y la hipodermis), compuesta principalmente por fibras de colágeno y elastina rodeadas por una “sustancia fundamental” que contiene glicosaminoglicanos, como el ácido hialurónico (“Histology, dermis” por Thomas M. Brown; Karthik Krishnamurthy). El colágeno constituye el componente principal de la dermis y, gracias a su rigidez y fuerza, crea la matriz funcional perfecta para mantener la integridad cutánea y preservar la firmeza y flexibilidad de la piel a lo largo del tiempo.

El envejecimiento crónico de la piel, así como el estrés externo, provocan la degradación y descomposición de las fibras de colágeno en la dermis y la ralentización de la síntesis de colágeno por parte de los fibroblastos, lo que lleva a la flacidez, las arrugas y otros signos visibles del envejecimiento ("Modulation of Skin Collagen Metabolism in Aged and Photoaged Human Skin In Vivo”, Journal of Investigative Dermatology, volumen 117, noviembre de 2001). Por este motivo, es fundamental adoptar una rutina de cuidado de la piel específica:

• • Para proteger la piel del daño causado por el fotoenvejecimiento
  • Para mejorar la síntesis de colágeno.

CONSERVAR EL COLÁGENO Y MEJORAR SU SÍNTESIS

La exposición crónica a la radiación UV, así como a otras agresiones externas dañinas induce estrés oxidativo y aumenta la síntesis y expresión de las metaloproteinasas de la matriz (MMP), la enzima responsable de la descomposición del tejido conectivo y la alteración de la estructura de la piel. Por eso, es importante el uso de ingredientes antioxidantes para contrarrestar con éxito el efecto negativo de los radicales libres y preservar las fibras de colágeno.

Además, para potenciar la producción natural de colágeno de la piel, existen ingredientes muy enfectivos como los factores de crecimiento de BIOEFFECT, o productos con ingredientes ya clásicos como el retinol (vitamina A) o la vitamina C, como los de BARBARA STURM, U BEAUTY, o ZELENS.

Por su parte RIVOLI GENÈVE, a través de su novedoso concepto de los "precursores", potencia sus tratamientos antiedad con lo que llaman “precursor del colágeno” con tecnología ASPRivoli®, capaz de relanzar de forma natural la síntesis de esta proteína estructural.